Filosofía Jedi

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Si hay en el cine una saga de éxito pese al paso del tiempo y el devenir generacional que se ha ido sumado a su legión de fans, es sin duda Star Wars.

Lo primero que deberíamos preguntarnos ante este fenómeno de masas es: ¿Qué tiene Star Wars, que después de 39 años (se estrena la primera película en 1977) sigue atrayendo y emocionando a millones de personas en todo el mundo?… no importa el país, el estrato social, la religión o la edad; enamora como el primer día y tiene el difícil don de conectar con un público multigeneracional y diverso.

Podemos responder con muchas y variadas conjeturas que nos aportarán distintas claves para alcanzar una resolución más global. En primer lugar, tenemos como gran protagonista de la saga a la figura del héroe que, además, se nos presenta en algunas de sus múltiples facetas: el héroe cotidiano, como pueden ser Han Solo o los integrantes de la resistencia; el héroe por excelencia, Luke Skywalker; pasando incluso por la figura del héroe redimido, como es el caso de Darth Vader.

También nos encontramos con la lucha por la libertad ante la opresión de un autoritarismo despiadado y sin escrúpulos; la lucha entre el bien y el mal, la luz contra la oscuridad; la necesidad de justicia para restablecer la paz y el orden y castigar a los villanos; la potente atracción de la ciencia-ficción junto a la posibilidad de una prolífica biodiversidad inteligente en el cosmos; la existencia de la fuerza, un misterioso poder presente en todo cuanto existe; la historia de amor; el código de honor, un ideal, una misión justa que cumplir; la utilización de las tres grandes escuelas de la escena: drama-tragedia-comedia; las claves políticas; la figura del hombre sabio o maestro; la influencia visual y narrativa de Kurosawa y de Flash Gordon; la influencia literaria de Joseph Campbell y su libro «El Héroe de las mil caras». Y cómo no, la utilización del símbolo en distintas claves que van desde lo humano a lo psicohistórico…

Sin embargo, tras todo ello, queda claro que uno de los motivos fundamentales del éxito de Star Wars es la figura del caballero Jedi, envuelto en ese romanticismo dado por la fusión entre el paladín medieval y el monje Shaolin que es, en definitiva, un monje guerrero inspirado en muchos ejemplos de nuestra pasada historia y cuyo poder de atracción y respeto siempre ha sido considerable por el conjunto de la sociedad.

Si el personaje definitivo es el Jedi, se entiende que su razón de ser y existir está fundamentada en su filosofía, que es la que le otorga sus cualidades, su forma y sentido de vida.

Lo primero en su filosofía es que sigue unas pautas que no ha inventado G. Lucas, sino que forman parte de una estructura «colegiada» a lo largo de la historia en infinidades de castas, órdenes y hermandades, especialmente en el ámbito guerrero y místico.

Star Wars creator George Lucas. (c) Lucasfilm Ltd. & TM. All rights reserved. PHOTOGRAPHS TO BE USED SOLELY FOR ADVERTISING, PROMOTION, PUBLICITY OR REVIEWS OF THIS SPECIFIC MOTION PICTURE AND TO REMAIN THE PROPERTY OF THE STUDIO. NOT FOR SALE OR REDISTRIBUTION.
George Lucas

Contamos con infinidad de ejemplos: templarios, monjes shaolin, samuráis, guerreros mayas, espartanos, sioux, sacerdotes egipcios, magos caldeos, druidas, chamanes… La mayoría se fundamentan en unos principios, un código de conducta con una serie de preceptos que distinguen al integrante por tres fundamentos principales:

Primero, por la búsqueda de la superación personal, del crecimiento interior, de la conquista de uno mismo y de determinadas cualidades y virtudes que lo harán mejor, más fuerte, más virtuoso y más capacitado. Para ello se precisa de la necesidad de un instructor o maestro, y de unas pruebas que superar o proceso iniciático.

En segundo lugar el poner a disposición esa capacitación al servicio de un ideal o una misión, generalmente justos, luminosos, altruistas, de servicio y protección hacia los demás.

Y por último, seguir un Código de Honor, que no los desvíe de su propia virtud ni de su misión o ideal y que sirva de apoyo y sustento moral.

A modo de entrañable anécdota y para ilustrar el profundo calado en el público del código del que estamos hablando, nos encontramos con esta carta de un niño pequeño a G. Lucas:

Querido George Lucas,

No me gusta que un Jedi no pueda casarse. Yo quiero casarme sin convertirme en un Sith. Por favor, cambia esa norma.

P.D: Quiero ir al Rancho Skywalker, por favor.

Con amor, Collin.

 La respuesta fue:

 Hola Collin,

Muchas gracias por escribirnos. Parece que la Fuerza es fuerte en ti y estás mostrando una gran sabiduría al hacernos tu pregunta. Ser un Jedi es conocer el valor de la amistad, de la compasión y de la lealtad; valores importantes en el matrimonio. Los Sith sólo piensan en sí mismos. Cuando encuentres a alguien con el que puedes conectar de una manera desinteresada, entonces estás en el camino de la luz y el lado oscuro no se apoderará de ti. Con esta bondad en tu corazón, puedes casarte.

Hemos adjuntado algunos regalos que esperamos que disfrutes.

Gracias de nuevo por escribirnos.

Que la fuerza te acompañe.

Sinceramente, tus amigos de LucasFilm.

La filosofía Jedi podría resumirse en tres preceptos fundamentales. Primero hablaríamos de La Fuerza, una especie de energía que lo penetra y sustenta todo. Fuente de todo cuanto existe y es. La Fuerza representa todas las claves y llaves de acceso al conocimiento profundo del ser humano y de las leyes y principios que rigen el universo. Después está el Equilibrio Mental, al que en todo momento se hace referencia de una u otra manera, y que podríamos resumir en autodominio; un control total que va desde lo físico y lo emocional, hasta el pensamiento, en pro de un código de conducta y acción al servicio del bien y una causa mayor. Y para terminar, nos encontramos con el Reverso Tenebroso, que es uno de los temas principales de toda la saga, y que nos plantea la eterna lucha entre el bien y el mal, especialmente en el interior del ser humano, que es donde primero se libran las verdaderas batallas de la vida. Según la sabiduría perenne, el mal no existe, pues no pueden existir dos absolutos antagónicos, por lo tanto, el mal es un abandono o alejamiento del bien. Por ello, constantemente se hace alusión al peligro del reverso tenebroso… más rápido, más fácil, más seductor… pero no más fuerte.

En definitiva, la filosofía Jedi nos muestra la figura de un personaje heroico por su capacidad para luchar contra el mal, por su sacrificio de sí mismo por los demás y por su incansable búsqueda de superación personal, elementos que más allá de Hollywood, se convierten en un excelente ejemplo de conducta para nuestras modernas sociedades sumergidas en una extenuante crisis de valores. Quizás por ello ha fascinado y fascina tanto, porque necesitamos héroes que nos inspiren en el difícil arte de vivir y de convivir en paz, justicia y fraternidad.

J. L. Gil Miró

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